Sabado 27 de abril 2024

"El gobierno nos está dando la espalda"

Redacción 16/03/2024 - 00.15.hs

La Cámara Argentina de la Industria de Chacinados y Carne de Cerdo (Caicha) y la Federación Porcina Argentina rechazaron "enérgicamente" la apertura de importaciones de alimentos anunciada por el gobierno de Javier Milei. En línea, denunciaron que se trata de una medida "sumamente discriminatoria" para con la industria nacional.

 

"Nos tomó absolutamente por sorpresa. Es una medida apresurada e inconsulta. Nosotros tenemos muchos insumos importados que componen el costo de producción que están cargados con el Impuesto PAIS y el anticipo de Ganancias, y de golpe van a abrir la importación de carne de cerdo y con beneficios, lo que nos lleva a competir en condiciones desiguales", sostuvo José Arrieta, presidente de la Cámara de Productores Porcinos de Córdoba y Tesorero de la Federación Porcina Argentina.

 

Esto último tiene que ver con que la medida dispuesta por la gestión de La Libertad Avanza no solo abarca una 'apertura de fronteras', sino que viene de la mano de instrumentos y facilidades para aquellas empresas que deseen desarrollarla, como lo son la reducción en los plazos de pago, con una importante diferencia en relación a los casos de insumos para la producción, así como la eliminación del cobro de percepciones de ganancias e IVA a los elementos de la canasta básica que lleguen a la Argentina en este marco.

 

Desconoce la realidad.

 

En el comunicado firmado por las entidades, titulado "Que los cerdos no sean los chivos expiatorios", se hizo hincapié en que esta decisión "desconoce la realidad del sector" así como "la evolución de precios de nuestros productos en góndola", con énfasis en que, afirman, "el precio del cerdo en pie ha caído más del 35%, pasando de $1155 a $744, presionando así a la baja los precios de los productos porcinos que compran los consumidores argentinos".

 

Según un relevamiento llevado adelante por ambas organizaciones, de diciembre a la fecha, los precios del chorizo fresco, del jamón cocido, la paleta (fiambre) y el salame, relevados por el Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires, aumentaron 29, 32, 34 y 33 por ciento respectivamente, menos de la mitad de la inflación acumulada medida por el IPC nacional, medido por el INDEC, para ese mismo período.

 

"Claramente la información que se le ha hecho llegar al Ministerio respecto a la evolución de precios en nuestro sector no es para nada precisa", apuntaron. Cabe remarcar que, en los últimos días, el ministro de Economía, Luis Caputo, sostuvo que los precios actuales, con críticas a las promociones 2x1 o 3x2 en el medio, "no reflejan la nueva realidad económica", en diálogo con representantes de las grandes cadenas de supermercados.

 

Y fue en estos en quienes puso la lupa Arrieta, quién aseveró que, "en lugar de tomar estas decisiones tan apresuradas, el gobierno debería evaluar bien en qué eslabón de la cadena no se trasladó esa baja del precio" y afirmó que "en donde esto no ocurrió es en el sector que más beneficiado se va a ver" con esta nueva medida.

 

"Escuchan y hablan solo con un sector que va a ser, precisamente, el que seguramente se va a ver favorecido, siendo, al mismo tiempo, el que no trasladó esta baja del cerdo a pie a los precios en góndola. De golpe, los beneficios impositivos con las importaciones lo van a tener ellos mismos. Claramente no lo han evaluado desde el gobierno", agregó.

 

Cuestión sanitaria.

 

Otra cuestión que es foco de discusión es la sanitaria, ya que, desde las entidades, denunciaron el uso en países como Brasil, uno de los mercados que más se ampliaría con esta cuestión, de aditivos alimenticios, como la Ractopamina, prohibidos para la alimentación de porcinos en Argentina.

 

"Hace años que estamos luchando con un tema muy delicado, y es el hecho de que en Brasil se usa un aditivo, un anabólico, que es Ractopamina, que mejora muchísimo el resultado en los costos de producción, y nosotros en Argentina no lo usamos, ya que está prohibido. Entonces pedimos, mínimamente, que si va a entrar carne sea sin ese aditivo y en condiciones sanitarias, como pasa en un montón de países y mercados. Tenemos que impedir eso", alertó Arrieta.

 

"Que lo revean".

 

Por todo esto, desde las entidades se solicitó al gobierno nacional "que revea su decisión para evitar así un daño innecesario a nuestros productores e industrias", que cuenta con cientos de miles de trabajadores y familias involucrados y con una faena de 8.3 millones de cerdos durante 2023.

 

"Atrás de cada corte de carne que está en una góndola o una carnicería, hay un montón de personas. Nosotros hemos tenido reuniones y estamos planteando esto. Si de golpe vamos a sustituir toda esa industria, que se viene desarrollando desde hace dos décadas, para que solamente algunos sectores importen y vendan, se va a empeorar el precio del cerdo en pie. Nosotros no queremos que se cierren las importaciones, sino competir con las mismas condiciones, y más en este panorama, de cara a unos años con crisis económica en donde el cerdo va a ser una alternativa muy importante para los argentinos", concluyó el porcicultor. (Perfil)

 

' '

¿Querés recibir notificaciones de alertas?