Sin energía por roturas

El canal revestido de 150 metros de largo, ubicado en la salida de la central hidroeléctrica, mostró un deterioro significativo. La reparación demandará al menos 60 días. Mientras tanto no habrá agua para riego ni para generación eléctrica.
Las importantes roturas en el principal canal derivador de agua del dique Salto Andersen dejó sin servicio desde el sábado toda la producción de la localidad rionegrina de Río Colorado. La central hidroeléctrica ubicada sobre el canal se vio obligada a suspender la generación de energía al sistema nacional. El dique se emplaza sobre el río Colorado en cercanías del paraje Pichi Mahuida.
Según informó el diario Río Negro, el trecho de hormigón armado de 150 metros de largo mostró un deterioro significativo y su reparación demandará al menos 60 días. Mientras tanto se deberá encontrar una solución rápida para continuar abasteciendo de agua a la producción frutícola y de la horticultora de las áreas irrigadas cercanas a la localidad de Río Colorado, que se encuentran en su punto de máxima demanda.
Si bien una comisión de peritos hará una evaluación de detalles, los datos recogidos por Río Negro en el lugar apuntan a que el problema principal estaría en la estructura existente desde hace varias décadas, construida por la ex Agua y Energía, que no habría soportado la gran presión que genera el agua en el lugar, provocando constantes movimientos del suelo.
Se calcula que los daños comenzaron a producirse en los últimos meses, cuando el lugar comenzó a ceder hasta que la estructura se partió y rompió, dejando grandes moles de cemento deteriorado.

Agujeros y rajaduras.
La represa de Salto Andersen está ubicada sobre el río Colorado, unos 70 kilómetros al oeste de la localidad de Río Colorado y en cercanías de Pichi Mahuida, el paraje donde nace el Acueducto del Río Colorado que alimenta a 16 localidades pampeanas. El dique fue construido en los '50 por la ex Agua y Energía y servía para alimentar el canal principal que lleva el agua a la Colonia Juliá y Echarren y a la población de Río Colorado. Hace unos años, el gobierno de Río Negro concretó un paso previsto en el proyecto original que había quedado inconcluso hasta ahora: dotar a la represa de una pequeña central hidroeléctrica. Aparentemente, la mayor carga de trabajo que impuso la central hidroeléctrica aceleró el proceso de rotura del canal.
El equipo técnico que envió el gobierno rionegrino deberá evaluar si el resto de la estructura se encuentra en condiciones para seguir funcionando. Lo que se pudo apreciar a simple vista es que las primeras seis enormes planchas tendrán que ser sustituidas completamente ya que están partidas y movidas.
El cronista de Río Negro que estuvo en el lugar advirtió por "el estado preocupante en que se encuentran los primeros 500 metros del principal canal de riego, donde parte del sector carece de las correspondientes paredes, producto del paso del tiempo y la falta adecuada de inversiones en el lugar", un viejo pedido de los sectores productivos de Río Colorado. "A lo largo de diez kilómetros son notorios los agujeros o extensas rajaduras, llenos de malezas en el hormigón, que provocan importantes pérdidas del volumen del agua que se deriva en cada temporada, dejando latentes constantes roturas en el sistema", señaló.